Mons. Oscar Aparicio, en el 5° domingo de cuaresma, en su homilía dominical en la Catedral Cochabambina destacó la necesidad de ser solidarios con los hermanos sufrientes y llevar a Dios que da la vida a través de su misericordia.
El Arzobispo de Cochabamba invitó a vivir el domingo de la solidaridad, que se realizó en todo el país. Pidió ver la realidad que se tiene en el entorno, “Nadie escapa a las situaciones difíciles”, es el caso del Tipnis, donde iría destinada la ofrenda solidaria de toda Cochabamba. Describió que esta zona afronta graves problemas, en especial la comunidad Santísima Trinidad donde los niños sufren el brote de leishmaniosis. Habló sobre la necesidad de mostrar el amor cristiano a estos hermanos con las donaciones.
Refiriéndose al evangelio dijo que toda nuestra vida, como cristianos y al igual que Jesús, debe pasar por la pasión “La vida que recibimos de parte de Dios pasa por la cruz”. Ya que como el Señor había asumido esa condición humana en el sufrimiento y había resucitado, cada uno está invitado a ser partícipes de la salvación. Dijo que como creyentes, que conocemos al Señor debemos anunciar la salvación.
Mons. Aparicio invitó a reconocer en la Pasión del Señor, que Él nos ha liberado de la muerte para tener vida. Dijo que estamos invitados a tener docilidad de corazón y aceptar la voluntad de Dios, para que recibamos la cruz y seamos glorificados como el Señor.
