Ante una notable ausencia de autoridades departamentales, Omar Aparicio fue posesionado como nuevo Arzobispo de Cochabamba. El flamante pastor de la Iglesia Católica anunció que continuará el trabajo y ejemplo de Tito Solari, su antecesor.
Asimismo, confía en sus colaboradores, religiosos y laicos para la tarea.
El rito inició con la Liturgia de la Posesión, es decir, el acto más importante de la ceremonia. Después, se dio lectura a la Bula del Santo Padre, en la cual el papa Francisco encomienda a Aparicio el mando de la Iglesia cochabambina.
Posterior a ello, Tito Solari hizo la entrega del Báculo a Omar Aparicio, quien acto seguido se sentó en la silla de Arzobispo. De esta manera, y acompañado por el repique de campanas, fue posesionado de manera oficial.
Luego, se procedió con la primera eucaristía precedida por el nuevo Arzobispo. En la homilía, Aparicio agradeció a Dios por haber sido elegido para la tarea. Dijo que asume la labor confiado de que el trabajo no comienza, sino que continúa con lo que hizo Tito Solari, a quien declaró venerar.
“Vengo confiado que el trabajo evangelizador no comienza conmigo. Soy heredero de una serie de hombres admirables por su trabajo, representados por monseñor Tito Solari, cuya persona y ministerio apostólico he venerado siempre (…) Tú (Por Solari) serás siempre para mí un maestro querido”, expresó el arzobispo Omar Aparicio.