Santa Cruz

Monseñor Sergio pide al pueblo apoyo y oraciones por los sacerdotes

A los sacerdotes les pidió “Ser profetas de los pobres siguiendo el ejemplo de Jesús” y afirmó que la Iglesia está y debe seguir siempre “al lado de los últimos y de las víctimas, jamás de los opresores”.

Antes más de 200 sacerdotes reunidos para renovar sus promesas sacerdotales y ante una catedral llena de fieles que llegaron desde distintos barrios de nuestra ciudad para animar y acompañar a los presbíteros de Santa Cruz, Monseñor Sergio inició su homilía este martes santo compartiendo el “saludo afectuoso” de parte del Cardenal Julio “El Cardenal agradece de todo corazón las oraciones de tantas personas y nos invita a estar unidos en esta Semana Santa y particularmente en el gozo del Señor Resucitado” indicó a tiempo de afirmar que “Él ha deseado fuertemente estar con nosotros estos días, compartir también su experiencia personal en los memorables eventos de la elección del Papa Francisco”.

Además de la bendición de los óleos para los sacramentos, la eucaristía de este martes santo fue para que los presbíteros renueven sus promesas sacerdotales, en este sentido el Arzobispo Coadjutor de Santa Cruz dijo que para los sacerdotes “No es fácil vivir a la altura de la vocación y ministerio que Dios les ha confiado, por eso –prosiguió el prelado-  les pedimos su apoyo y sus oraciones, para que en cada momento de nuestra vida,  “avivemos la llama“, el don que hemos recibido de Dios”.

Durante su homilía Monseñor Sergio insistió en que la  tarea prioritaria de la Iglesia es y debe seguir siendo “estar al lado de los últimos y de las víctimas, jamás con los opresores”, por eso invitó a los sacerdotes a hacer como Jesús que puso su primera mirada “en los hambrientos, en los enfermos y en los pecadores”.

Para no dejar lugar a dudas, remarcó que  los sacerdotes son “Servidores de la Buena Noticia a los pobres” y que eso exige “estar en medio de ellos, vivir en sencillez a su estilo y estar a su lado en la justa lucha de conseguir mejores condiciones de vida, una vida digna de los hijos de Dios”. Sin embargo afirmó que para eso es necesario la palabra profética “una palabra que denuncia toda clase de injusticia y opresión, en una sociedad secularizada que se rige por la lógica del poder y del tener…”

Para Monseñor Sergio, este exigente programa de vida que tiene los sacerdotes “exige una apertura total al Espíritu Santo, ponernos decididamente en el camino de la santidad, para santificar también a la comunidad y a la realidad que nos rodea” indicó.