Solemnidad de la Santísima Trinidad, nuestro Pastor, en su homilía, nos invitó a reconocer que Dios está con nosotros y no nos ha abandonado. Con ello recordó que estamos convocados a ser Comunidad, llamada a la plena unidad y hacer crecer esta con el anuncio del Señor, en la Alegría del Evangelio.
Monseñor destacó que es una festividad que alegra el corazón pues es el anuncio del Señor que está con nosotros y no nos abandona. Con ello además señala que, si bien este misterio es difícil de entender, en nuestra pequeña capacidad humana. “Por tanto se trata de contemplar, más que tratar de entender, por medio de nuestra inteligencia aquello que el Señor nos está regalando. Misterio es aquella forma de ser de Dios que poco a poco se muestra y nos hace entender poco a poco”.
Basado en las sagradas escrituras expresa que Dios se nos revela a través del Padre, que nos ha creado. También subraya la expresión de Dios que nos ama y nos libera a través de Jesucristo su Hijo, que da su vida y nos rescata a precio de sangre. “Como Pablo dice podemos decir a Dios Abbá Padre. Es un Dios que nos ha dado la experiencia total que nos sabemos amados por Él y así podemos amarnos entre nosotros”. Así mismo mencionó que es una revelación hermosa pues nos hace entender quienes somos, de donde venimos y a dónde vamos. “Se nos regala a raíz de la presencia amorosa de la Santísima trinidad entre nosotros”, Dijo el Arzobispo.
Subraya que en esta solemnidad se nos convoca también a ser comunidad, ser Iglesia: Signo de amor, paz, unidad y justicia. En este sentido refleja las palabras del Señor en la Evangelio. “Se nos ha convocado, se nos ha bautizado, para que a través de nuestra misión y de nuestro ser cristiano, podamos proclamar y ayuda a que todos sean bautizados en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo” para también enseñar todo lo que el Maestro nos ha mandado.
Concluyendo, Monseñor recordó a las Comunidades Eclesiales de Base que celebraron su jornada, en el deseo que se fortalezcan y crezcan en número. “Pidamos para que todos vayamos teniendo experiencia, también de la Trinidad, que estas comunidades se fortalezcan en medio de nuestra realidad, en medio de nuestra Iglesia en Cochabamba”.
“Gloria a Dios que es Padre, Hijo y Espíritu Santo”
Fuente: Arquidiócesis de Cochabamba
