Monseñor René Leigue Césari, obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Santa Cruz, durante la homilía dominical llamó a los fieles a luchar en contra del aborto y a defender la vida que es un regalo de Dios.
“¿Tenemos fe? Luchemos por todos y cuanto más por la vida, la vida que el Señor nos regala que es una gran dádiva, todos queremos vivir. Hoy en día se habla del aborto y está la polémica desde cuándo empieza la vida, creo que eso no se debe discutir, la vida es un regalo de Dios y por lo tanto tenemos que luchar por ello”, expresó el prelado.
El obispo auxiliar agregó que nadie puede quitar la vida ni decir desde aquí empieza y olvidarse del resto. Nosotros, prosiguió, estamos llamados a eso, a luchar por esa vida que el Señor manda.
“Hay que pensar que es una criatura que viene y que quiere llegar a este mundo a disfrutar de todo lo que el Señor nos ha regalado y ¿quiénes somos nosotros para decir no, a ti no te corresponde, tú no puedes llegar, tú no puedes ser parte de este mundo en el que nosotros vivimos?”, enfatizó.
Asimismo, durante la homilía, monseñor Leigue hizo énfasis en la fe, rememorando que este es el año de la fe y que esta es la que hace esperar aquello que no se ve, pero que los feligreses saben y tienen conciencia de que sí existe.
“Aquel que no tiene fe, no le importa el sufrimiento del otro y solamente se preocupa por sí mismo, pensando que hay que acomodarse en la tierra sin pensar en el premio que el Señor nos ha ofrecido a los que cumplimos su palabra. Como nos dijo el papa Francisco: No nos dejemos quitar la fe”, puntualizó el religioso.
Gualberti, dado de alta
Por otro lado, monseñor Sergio Gualberti que el pasado sábado fue sometido a una angioplastia y colocación de stent para destapar su arteria y evitar un infarto, ayer por la mañana fue dado de alta y ahora se encuentra en recuperación en su domicilio particular.
Alfredo Romero, director de la clínica Incor, donde la madrugada del sábado fue intervenido el pastor episcopal de Santa Cruz, explicó que luego del cateterismo cardiaco que se le practicó, el sacerdote está fuera de peligro y que debe guardar reposo durante una semana, caminar dentro de su casa y seguir un tratamiento vía oral