(ROMA) El cardenal Bertone anuncia que la misión de la delegación del Sínodo en Siria se pospondrá en consideración de la “gravedad de la situación”
La delegación que Benedicto XVI había dispuesto enviar a Siria —para expresar, en nombre del Sínodo de los obispos y el suyo propio solidaridad y cercanía a la martirizada población de la nación— partirá probablemente no antes de la conclusión del Sínodo y sus componentes variarán. Lo ha anunciado el cardenal Tarcisio Bertone, secretario de Estado, en la apertura de los trabajos de la 19ª congregación general, celebrada el martes 23 de octubre, por la mañana, en presencia del Papa.
Tras la intervención del cardenal Bertone, el arzobispo Eterović, secretario general del Sínodo de los obispos, expresó, de parte de todos los padres que habían intervenido, la solidaridad al episcopado y a los cristianos de la República Democrática del Congo por el secuestro de tres misioneros agustinos de la Asunción, ocurrido en la región de Butembo, en el noreste del país. El prelado se unió al llamamiento de la Conferencia episcopal del país africano por su liberación.
A continuación monseñor Eterović introdujo los trabajos de la asamblea informando de que se habían presentado 326 proposiciones, reducidas a 57 tras un atento examen. El cardenal Wuerl, relator general, y el arzobispo Carré, secretario general, leyeron en latín el elenco de las proposiciones, que se han distribuido en cuatro secciones: la naturaleza de la nueva evangelización, el contexto de la misión actual de la Iglesia, las respuestas pastorales a las circunstancias de nuestros días y los agentes/participantes de la nueva evangelización.