Transcripción de la Homilía:
¿Tú eres católicos?, ¿Por qué dices que eres Católico?
Tenemos que recordar queridos hermanos que nosotros somos Católicos porque vivimos en comunidad a ejemplo, a inspiración de nuestro Dios que es uno y trino, ahí tiene sentido la vida comunitaria de la Santísima Trinidad. Nuestra identidad de Cristianos Católicos es que vivimos en familia, vivimos como hermanos, reconociendo a un solo Dios y nuestra relación tiene que ser y es de hermanos. Esta vida de familia, esta vida de comunidad, esta vida de unidad, bajo nuestro único Dios uno y trino, produce en nosotros un gozo que no lo podemos callar.
Ahí va el lema tan lindo que tenemos “lo que hemos visto y lo que hemos oído, no podemos callar”, esto que experimentamos en la familia Católica, queridos hermanos, esta alegría de amar y sentir el amor de otros, tenemos que transmitir, sino, vamos a explotar con una bomba, tenemos que transmitirlo a los demás para decirles “vale la pena ser Católico, vale la pena vivir en familia” y esa experiencia de familia hay que anunciarles a los demás, para que se hagan parte de nuestra gran familia universal, la Iglesia Católica.
Queridos hermanos de ahí que nosotros estamos llamados por nuestra propia identidad, por lo que somos, por nuestra espiritualidad Católica a ser misioneros, y tenemos que ser misioneros en primer lugar en el hogar, en la casa, en la familia, en el barrio, en nuestro pueblo, en nuestro trabajo, en nuestra casita de campo, allá donde estamos, tiene que notarse queridos hermanos que hay algo especial en nosotros, hay un condimento muy especial que está colocado, puesto, inspirado por el Espíritu de Dios.
No podemos ser uno más del montón, incluso, aun cuando estemos en el estadio tan hermoso que tenemos aquí “Hernando Siles” de Miraflores, donde hay treinta, cuarenta mil personas, tiene que notarse que estamos ahí y tiene que ser diferente nuestra presencia, sin muchas palabras, sin muchos gestos, solamente con nuestra presencia, que se pregunten ¿y este quién?. Tiene que notarse queridos hermanos, allá donde estamos, que nosotros somos personas especiales, porque vivimos nuestra fe Católica intensa y profundamente.
Por eso yo he traído ahora nuestras bolsitas misioneras de hace 40 años, para ir de misiones, cuántos de ustedes habrán ido de misiones llevando una, ¿qué significa esta bolsita?… Queridos hermanos en primer lugar la bolsita así sencilla, tejida, significa la sencillez, significa la humildad, significa la cercanía, dentro de la “Huayaquetita” está también otra bolsita, con el “tapeque”… en nuestro mundo andino la coquita, para compartir, para empezar a hablar con la gente.
Entonces queridos hermanos si nosotros queremos ser misioneros, pero nosotros somos misioneros. Si queremos ejercer nuestra dimensión misionera, con mucha humildad queridos hermanos, en la casa sobre todo, con mucha cercanía, con mucha familiaridad, tenemos que ser verdaderos artistas para conquistar a nuestros hijos y que sean parte de nuestra Iglesia Católica. No se puede decir en estos tiempos “¡vas a ir a la misa, te vas a confesar!”, eso era hace 250 años. Ahora tenemos que ser verdadero testimonio de humildad, de cercanía, de amor para que nuestros hijos nos digan “vamos a la misa” y eso significa el amor, la humildad, la sencillez, la cercanía, el buen trato hermanos, eso conquista increíblemente.
La bolsita lleva adentro una joya, ser misioneros… ¿dónde ve y dónde oye?, en la Palabra de Dios. Todo Cristiano Católico tiene que tener su buena Biblia, si no este es un transportista sin coche, es un cazador si de escopeta, es un futbolista sin pelota, un Católico misionero tiene su buena Biblia, no cualquiera. Benedicto XVI el Papa precedente a nuestro Papa Francisco ha dicho: “La Palabra se hizo carne (haciendo referencia a juan 1), se encarnó en medio de nosotros y puso su tienda en nosotros. Esta Palabra que se hizo carne es Jesús, por lo tanto, la presencia de la Palabra de Dios en nuestro hogar, es como la presencia de Jesús en el Santísimo Sacramento”. Ha equiparado Benedicto XVI a la Sagrada Palabra con el Santísimo Sacramento y teológicamente, bíblicamente bien fundamentado.
Entonces queridos hermanos, nosotros somos misioneros, tenemos que tener una buena Biblia y ahí vamos a ver y vamos a oír lo que el Señor quiere de nosotros, con calma, con paciencia, pidiéndole al Señor su iluminación. No se puede, poquito a poquito uno entiende la Palabra, poco a poco, no se desesperen, es como aprender casi otro idioma.
Lógicamente queridos hermanos está el cancionero, no puede faltar el cancionero. Al misionero no le puede faltar su cancionerito, ahí hay canciones de todos conocemos y hay una canción misionera que todos conocemos “al pecho llevo una cruz y en mi corazón lo que dice Jesús” [Música]. Escuchen lo que dice, todos queridos hermanos “al pecho llevo una cruz y en mi corazón lo que dice Jesús”, queridos hermanos, todo misionero al pecho lleva una cruz, yo veo algunas personas llevando cruces hasta en sus orejas, pero no saben lo que están llevando. Queridos hermanos llevar una cruz en el pecho, quiere decir que estamos cargando con nosotros el proyecto salvífico de Jesús, la pasión, la muerte y la resurrección. No cualquier “Yauya, Yauya” va a llevar una cruz en el pecho, en el pecho llevamos una cruz los valientes, los que nos hemos unido y nos hemos identificado con Cristo y los que estamos decididos a jugarnos la suerte de Cristo y si alguien quiere tomar nuestra vida, que la tome.
Por eso llevamos una cruz en el pecho, eso se llama en difícil “El Kerigma”, el anunció de la pasión, la muerte y la resurrección de Cristo. (El Arzobispo explica origen de su cruz y canta con la comunidad la estrofa “al pecho llevo una cruz…” para luego continuar explicando). El que canta, reza dos veces. Entonces en el corazón lo que dice Jesús y qué dice Jesús “que nos amemos”, el amor de la familia que después tenemos que comunicarlo en la misión.
Entonces miren queridos hermanos, eso es ser misioneros, mucha gente se complica, obispos, sacerdotes y catequista, se preguntan ¿qué es eso de misión permanente?, ¿cómo se entiende?…Misión permanente, transmitir el amor de Cristo permanentemente, allí donde estés, con humildad, con la bolsita, con alegría, con mucha alegría. Queridos hermanos, esa es la misión, para qué nos vamos a complicar, más estudios, más licenciaturas, más doctorados, más tantas cosas. Empecemos a amar a la gente y así vamos a vivir intensa y profundamente nuestra vida Católica y nuestra vida misionera. Que así sea queridos hermanos.
Fuente: Iglesia Viva