Oruro

Carnaval de Oruro: OTRO CARNAVAL

A poco de la fundación de la Real Villa de San Felipe de Austria, junto al asiento minero de San Miguel, donde por encargo del encomendero don Lorenzo de Aldana quedó plasmada la imagen de la Virgen de la Candelaria, llamado por los pobladores “El Socavón de la Virgen”, y más tarde, a la Virgen la llamaron la “Virgen del Socavón”. Los mineros de la época empezaron a honrarla en su fiesta con bailes en comparsas.

Imagen pintada en un muro del Asiento Minero San Miguel

El P. Emeterio Villarroel1, narra en su “Origen del culto a la Virgen del Socavón” que Anselmo Bellarmino, un ladrón con el alias de El Nina Nina tenía aterrorizada a la población por sus fechorías (por promesa, se abstenía robar a los pobres). Estaba enamorado de una mozuela: Lorenza Choquiamo. Cuando intentaban huir, es herido de muerte por el padre de ella. Mal herido, huye del lugar; en su guarida es socorrido por una señora que lleva con ella a un sacerdote para escuchar su confesión (El P. Carlos Borromeo Mantilla2).

Los pobladores descubrirían su cadáver en una mina a los pies de la Imagen de la señora: la Virgen del Socavón. Cuenta el P. Emeterio Villarroel, que los mineros deciden que: “todos los años se celebraría con gran pompa la fiesta de la Virgen, debiendo, precisamente, coincidir ella con la fecha en que cayese el sábado de Carnaval, víspera de la quincuagésima, tanto porque pocos días antes ocurrió el suceso (Carnaval de 1789), cuanto porque sólo entonces tenían los mineros una libertad de tres días de trabajo, los indispensables para celebrar la fiesta, tal como ellos la deseaban. De donde se origina que dicha festividad es movible y que tiene precisamente que caer en el carnaval, pese a los calendario, bula y ritos de la iglesia católica”3.

El año 1818, el P. Ladislao Montealegre, quiso aprovechar una de aquellas danzas (la diablada) con que honraban a la Virgen de la Candelaria plasmándola en una representación en la que el Arcángel Miguel a cuya protección estaba dedicada aquella mina, hacía frente a los diablos comandados por satanás, lucifer y la china supay (hembra diabla). Entabla una batalla contra ellos y los siete pecados capitales. Tras ser sistemáticamente derrotados recordando que frente a aquellos pecados, están las virtudes a cultivar, se les ordena que al culminar su danza, deberán pasar de rodillas ante el Altar de la Virgen.

Aunque los devotos desde su inicio fueron los mineros, fueron los gremios que los atendían fueron los que dieron forma a la peregrinación devocional danzante hacia el Santuario de la Virgen del Socavón. El gremio de los carniceros (mañasos)4 fueron los primeros en constituirse en grupo estable con Pasantes, personajes estables de El Arcángel Miguel, satanás, lucifer, la china supay y los siete pecados, el 25 de noviembre de 1904. Otros, serían los que proveían de la hoja de coca para el “pijcheo”5 de los mineros (con la danza de la morenada); los que transportaban la mercadería en sus carritos de mano (con la danza de los tobas), o los que proveían de velas (los Inkas)

Con el correr del tiempo, aquella “Entrada”6 en devoción a la Santísima Virgen del Socavón fue reconocida por la UNESCO como “Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad”.

La Iglesia orureña, ve en esta gran fiesta, las “Semillas del Verbo” y la asume como opción pastoral. Por ello, los sacerdotes acompañan a los Conjuntos Folklóricos en sus Veladas a la Virgen del Socavón que cada conjunto a través de sus directorios, cofradías y bloques ofrecen. En el Primer Convite7, el Último Convite8 y el Sábado de Peregrinación, son presididas por el Obispo, los Directivos de la Asociación de Conjuntos Folklóricos de Oruro y Autoridades. Para este año, el lema que nos prepara como Diócesis a celebrar el Centenario de creación fue: “Virgen del Socavón: Discípula-Misionera del Señor”

Este Miércoles de Ceniza, inicio de la Cuaresma, como danzarín de la Morenada desde hacen 29 años atrás, escribo estas notas para compartir la gracia de mi bloque al haber contado entre nosotros a dos sacerdotes diocesanos que nos acompañaron en nuestro caminar de fe.

Antes de iniciar nuestra danza en Los Convites y el Sábado de Peregrinación, recibimos de ellos la bendición como peregrinos y, el pasado viernes 17, la víspera de nuestra Peregrinación, en una Velada de nuestro Bloque a la “Mamita del Socavón”, la bendición de los trajes que estrenaríamos para la Virgencita. Al llegar al Santuario, también ellos nos tomaron la promesa de baile y la bendición en la Casa de la Madre. El privilegio de tenerlos entre nosotros y también la sensación de una bendición particular del Señor hacia nosotros por tal acompañamiento.


NOTAS:

1 Encontré en los libros bautismales de la Iglesia Matriz (La Catedral de Nuestra Señora de la Asunción) desde julio de 1902, partidas firmadas por el P. Emeterio Villarroel; más tarde, en 1912, también en la Parroquia de San José de Poopó.

2 Por homonimia, el Primer Convite, se celebra el domingo posterior a la memoria de San Carlos Borromeo (4 de noviembre)

3 A través de la historia, el año 1821 coincidió el 2 de febrero con el sábado de Carnaval; el año 2008 volvió esa coincidencia. Se volverá a vivir el año 2143

4 “Mañaso”: comerciante que realiza el ciclo completo de comercialización: Compra de ganado, faeneado y la venta.

5 “Pijcheo”: masticar hojas de coca; ayuda a soportar largas jornadas de trabajo sin cansancio; quita el sueño, da energía. Se dice que en la mit’a era muy usada en el trabajo de explotación, junto con el alcohol. Era tomado como signo oprobioso de explotación. En cambio, el “acullicu”, en la ritualidad del mundo andino. En las Veladas a la Virgen, se distribuye entre los invitados (que reciben con las manos juntas como signo de respeto), de consumo comunitario. Se acullica mínimamente tres veces (guardando cada vez en un carrillo opuesto) pidiendo por salud, vida y trabajo. En cada inicio del acullicu, con cuatro hojas enteras y la parte clara hacia arriba en comunión con la comunidad, con uno mismo, la naturaleza y el Trascendente.

6 Para la Peregrinación del Sábado de Carnaval, los sectores sociales bajos, hacían su “Entrada” danzante por el centro de la ciudad. Una toma pacífica del Centro de la ciudad

7 Ingreso de las Fraternidades con sus uniformes distintivos hacia el Santuario, el domingo posterior a la Fiesta de San Carlos Borromeo. Es la peregrinación en la que se pide permiso a la Virgen para bailar para Ella el sábado de Peregrinación del Carnaval. A partir de entonces, cada sábado, las fraternidades, sus cofradías y bloques, ofrecen veladas a la Virgen del Socavón. En conjunto y en la sede de la Asociación de Conjuntos Folklóricos de Oruro (ACFO), harán una cada mes con 17 o 18 fraternidades juntas a las que acompañan sacerdotes por turnos. La Primera y última ofrecidas por el Directorio, son presididas por el Obispo de Oruro.

8 Una semana antes del Sábado de Peregrinación, también hacen su peregrinación en traje característico de cada fraternidad. Pasando también de rodillas ante el Altar de la Virgen, los danzarines prometen bailar para Ella el sábado siguiente. Tanto en el Primer Convite, el Último Convite y el Sábado de Peregrinación, el Obispo, Dirigentes de la ACFO y autoridades, también pasan de rodillas ante el Altar de la Virgen.

Inicio del Primer Convite
Celebración de la Palabra y bendición previo a nuestro Último Convite
Junto a los Pbros. Andrés Loroño y Rubén Darío Tastaca
Pbros. Ramiro Gómez y Andrés Loroño en la Celebración
Junto al Jefe de Bloque, Jorge Gonzales y los Pbros. Andrés Loroño y Rubén Dario Tastaca
Nuestra Peregrinación
Nuestro paso de rodillas ante el Altar de la Virgen del Socavón
Bendición de los danzantes
Bendición de nuestros trajes que estrenaremos para la Virgen en el Sábado de Peregrinación
Bendición