Quizás desde la política se ve bien que lleguemos a ser una sociedad mejor, pero después de tantas luchas de poder, hacen triste la convivencia.
Los cristianos anunciaban a un Dios Padre de todos, y que el emperador no es un Dios, es un hombre.
Los que tienen hambre y sed de justicia, serán saciados o consolados.
Felices los perseguidos por practicar la justicia, por hacer el bien aun cuando el ambiente parece que nos lleva al mal.
El mensaje cristiano no se puede entender sin la fe, sin el amor de Cristo.
Felices ustedes cuando sean insultados, perseguidos y calumniados a causa de Mí y del Evangelio.
El corazón puro nos da ojos limpios para mirar y ver a Dios, ver a los demás y a los que trabajan por la paz.
Homilía de Mons. Jesús Galeote, O.F.M.
Obispo del Vicariato Apostólico de Camiri
Las bienaventuranzas
29 de enero de 2023
Link para ver la Santa Misa presidida por Mons. Jesús Galeote, O.F.M.
Tantísima gente encontró en Jesús un mensaje de esperanza, amor, sanación y el Reino de Dios
Queridos hermanos y hermanas:
Reciban nuestro saludo de Paz y bien. En este cuarto domingo del tiempo durante el año, se nos presentan las bienaventuranzas, un mensaje realmente bello del Señor que, como nos dice San Mateo, seguían a Jesús grandes multitudes que llegaban de la Galilea, de la Decápolis de Jerusalén de Judea y de la Transjordania. Es decir, vemos a Jesús rodeado de tantísima gente que ha encontrado en Él un mensaje de esperanza, una experiencia de amor, de sanación, una experiencia del anuncio del Reino de Dios. Y nos dice San Mateo que, al ver la multitud, Jesús se subió a la montaña, se sentó y sus discípulos se acercaron a Él.
Hay similitud entre el monte de las bienaventuranzas de Jesús y el monte Sinaí, donde Dios entregó a Moisés los diez mandamientos
Hermanos es fácil ver la similitud entre esta montaña o monte de las bienaventuranzas y el monte Sinaí donde Dios entregó a Moisés la tabla de los diez mandamientos. Podemos decir que son momentos importantes en la historia de la humanidad y en la historia de la espiritualidad. Los diez mandamientos ya nos abren en primer lugar al amor de Dios con el corazón, con la mente, con toda nuestra fuerza, nos habla ya también del culto y de la gloria que debemos dar a Dios y no tomar el nombre de Dios en vano. Es decir, ¿cuántas veces se utilizó el nombre de Dios para justificar guerras o violencia? Y por eso, “No tomarás el nombre de Dios en vano” Los siguientes mandamientos ya nos hablan de las relaciones humanas, del respeto en la familia, a los padres, a los hijos, del respeto a la vida, del cuidado de nuestro cuerpo y la sexualidad bien vivida. También de no perjudicar a los demás con el robo, con la calumnia, etc. Así los diez mandamientos.
Jesús nos trae el mensaje de las bienaventuranzas que proclaman el perdón, como camino de reconciliación.
Pero Jesús en este momento nos trae el mensaje de las bienaventuranzas, el va comprendiendo que las grandes mayorías de la humanidad, entonces y ahora, son las grandes mayorías que luchan, que trabajan y que necesitan experimentar el consuelo de Dios. Este capítulo quinto se seguirá después en el que el Señor comparará lo que se dijo y lo que propone frente a la venganza, Él proclamará el perdón como camino de reconciliación y así Jesús irá dando el mensaje del nuevo testamento, de la esperanza.
“Las bienaventuranzas” significan: felicidad. El mensaje del Evangelio está dirigido a encontrar la felicidad.
Hermanos dice que Jesús entonces tomó la palabra y comenzó a enseñarles, aquí San Mateo nos presenta todas “las bienaventuranzas” que significa: Feliz, felicidad. El mensaje del Evangelio está dirigido a encontrar la felicidad. Esa palabra tan bonita, donde a veces queremos encontrarla allí donde no está, porque la felicidad creo que es una experiencia interior, de sentirnos en las manos de Dios, de sentir paz en el corazón, de sentir que nuestra vida tiene un sentido, que es bella a pesar de tantas dificultades y pedirle al Señor que incluso en medio de las dificultades podamos sentirnos felices en el amor del Señor.
Quizás desde la política se ve bien que lleguemos a ser una sociedad mejor, pero después de tantas luchas de poder, hacen triste la convivencia.
Hermanos, no es una experiencia que no hayamos tenido, a veces entre la gente también sencilla se encuentra la sonrisa, la alegría y hay el peligro de que cuando buscamos solamente los bienes materiales, el poder, haya muchas luchas, muchas peleas, muchos enfrentamientos. Quizás en los campos de la política se ve bien que en las palabras bonitas lleguemos a ser una sociedad mejor, después tantas luchas del poder que hacen triste la convivencia.
En los barrios con menos recursos económicos se puede ver que el amor es más grande que las diferencias.
Mientras que incluso en los barrios con menos recursos económicos, tantas veces salen respuestas de solidaridad, lo hemos visto, hemos vivido la pandemia y en dificultades, cómo vienen ollas comunes, preocuparse del otro, es decir cómo el amor es más grande que las diferencias. Pues bien, Jesús en las bienaventuranzas nos da las claves para vivir la felicidad, incluso en medio de la dificultad, una luz en medio de la oscuridad, y un rayo de sol en medio de la tormenta. Hoy agradecemos la lluvia, así que no esperemos pronto el rayo de sol, que llueva bien, que nuestro querido vicariato, nuestro querido Chaco necesita mucha agua, pidámoselo a Dios.
El que tiene alma de pobre, no quiere apropiarse de la creación sino quiere alabar a Dios y que su creación sea para todos
En primer lugar, Jesús dice felices los que tienen alma de pobres, porque a ellos pertenece el reino de los cielos, hay un libro muy bonito de Eloi Leclerc que es “La sabiduría de un pobre” hablando de San Francisco de Asís. Cómo él ha ido comprendiendo desde su vivencia de la humildad, de la sencillez, de la pobreza, ha ido descubriendo a un Dios grande, el Dios de todos y ha sabido alabarlo “alabado seas mi Señor, por todas tus criaturas” ¿Por qué? Porque como tiene alma de pobre no quiere apropiarse, quiere alabar y que esa creación sea para todos. Por eso desde su alma de pobre alabará al Sol, la Luna, las estrellas, el hermano fuego, la hermana agua, es decir, tiene desde la sabiduría de un pobre, la capacidad de mirar con los ojos de Dios.
El que tiene alma de pobre sabe ver la acción de Dios en medio de las dificultades de la Vida
Pidamos esta sabiduría para nosotros. Esta sabiduría también nos ayuda a ver el bien de los demás cuando tenemos enfrentamientos, vemos lo negativo, cuando tenemos amor vemos lo bueno. Es el corazón de una madre que incluso al hijo que tiene sus problemas lo va a apoyar siempre. Es esta alma de pobre que sabe ver la acción de Dios en medio de las dificultades de la vida.
El alma de pobre nos quita envidas, rivalidades y avaricias porque descubrimos que somos ciudadanos del cielo
Hermanos, el alma de pobre también nos quita, nos quita de tantas envidias, de tantas rivalidades, de tantas avaricias ¿Por qué? porque nos descubrimos que somos ciudadanos en esta tierra, pero sobre todos ciudadanos del cielo llamados por Dios a una vida con Él y que como dice porque de ellos les pertenece el reino de los cielos, que empieza aquí y continúa en la vida eterna.
Los que tienen hambre y sed de justicia, serán saciados o consolados
Hermanos estas bienaventuranzas nos hablan también de la aflicción, de la paciencia y de los que tienen hambre y sed de justicia. Hermanos la persona, el cristiano también tiene la experiencia de la aflicción, de los momentos de dolor, de los momentos de dificultad, de enfermedad, hambre y sed de justicia, cuántas veces clamamos para que el mundo sea mejor, pero el Señor nos da los instrumentos, nos da una mente en la que podemos ver el bien, un corazón para conocer la verdad, hacer el bien, y la bondad, y la belleza. Por eso el Señor nos da los instrumentos para que podamos hacer el mundo según Dios, y por eso el alma del pobre, también la paciencia, los que tienen hambre y sed de justicia dice serán saciados o consolados o recibirán la tierra en herencia.
¿Cómo se viven las bienaventuranzas? Miremos a Jesucristo, predica y consuela incluso cuando está humillado en la cruz
Hermanos cada bienaventuranza es un momento de mirar nuestra alma y el que ha vivido las bienaventuranzas es Jesucristo, así que cuando queramos decir: ¿Cómo se viven las bienaventuranzas? Miremos a Jesucristo. Cómo el predica, consuela y en el momento del dolor, incluso cuando está humillado en la cruz, El dice perdónalos porque no saben lo que hacen.
Felices los misericordiosos, los que tienen el corazón puro
Hermanos aprendamos de Jesucristo qué es, qué son las bienaventuranzas. Las siguientes tres bienaventuranzas o felices dicen: Los misericordiosos, los que tienen corazón, el corazón puro y los que trabajan por la paz. Hermanos en primer lugar: La Misericordia. La Misericordia significa mirarnos ante Dios y saber que, a pesar de nuestras misericordias, Dios nos mira con pasión. Y por eso el misericordioso no es que no vea el mal, pero ve una luz de esperanza y del bien en el otro. No en todo negativo, ve una luz de esperanza, pero sobre todo Dios la ve en nosotros, incluso en medio de nuestras dificultades, errores, pecados, Dios siempre nos da una luz de esperanza y tiene un corazón que viendo nuestras miserias nos ama. Aprendamos de Él la compasión, el perdón.
El corazón puro nos da ojos limpios para mirar y ver a Dios, ver a los demás y a los que trabajan por la paz
También nos dice los que tienen el corazón puro porque verán a Dios. Sabemos que la pureza es la autenticidad, si decimos oro puro es que sin que tenga otras mezclas, pues un corazón puro es el corazón que tiene la luz de Dios, que tiene la mirada de Dios y nos hace ver la profundidad de la vida. Por eso el corazón puro nos da ojos limpios para mirar y ver a Dios y ver a los demás y a los que trabajan por la paz, porque serán llamados hijos de Dios.
Hazme instrumento de tu paz. ¿Cómo se hace? Cambiando el mal por el bien
Hermanos, decir que hoy necesitamos muchos que sean constructores de paz, como se lo decimos a San Francisco, hazme instrumento de tu paz. ¿Cómo se hace? Cambiando el mal por el bien, ¿Hay odio en el mundo? Hay odio, pero ¿necesita más odio? No, amor. ¿Hay duda, hay falta de fe? Sí, pero lo que necesita es una fe fuerte, un amor grande. Así es el camino de las bienaventuranzas, saber que el Señor no nos deja abatidos, nos deja con una luz de esperanza con la cual podemos ser constructores de Paz. Y aquí las palabras de Jesús, “que no busque tanto ser amado como amar, ser comprendido como comprender” ¿Por qué? Porque a veces el que da recibe, el que busca halla. Esto es esa sabiduría del pobre.
Los cristianos anunciaban a un Dios que es Padre de todos, y que el emperador no es un Dios, es un hombre
Hermanos las dos últimas bienaventuranzas son curiosas pues dicen: “Bienaventurados los que son perseguidos por practicar la justicia” Hermanos, cuantas veces hemos visto en la historia de los mártires, aquellos hombres y mujeres que por ser fieles a Dios sufrieron el martirio. Eso ha sido una experiencia de la Iglesia desde el inicio, cuando hubo las persecuciones, porque los cristianos anunciaban a un Dios que es Padre de todos, y decían que el emperador no es un Dios, es un hombre y que no puede hacerse un dictador de todas las familias y de un estado, que es un siervo de Dios, que un día Dios le pedirá cuentas.
Los poderosos mueren y si no tienen un alma grande, tendrán que ver la purificación o el castigo de Dios
Por el cristiano también sabemos que adoraban a un solo Dios y no adoraban a ningún ídolo de esta tierra, a ningún poderoso. Y eso claro que en toda época, los poderosos persiguen a los que tienen esta alma pura que saben y recuerdan que hay un Dios que nos juzgará a todos, y que también los poderosos mueren y si no tienen un alma grande, tendrán que ver la purificación o el castigo de Dios.
Felices los perseguidos por practicar la justicia, por hacer el bien aun cuando el ambiente parece que nos lleva al mal
Por eso dicen felices los que son perseguidos por practicar la justicia, por hacer el bien, incluso cuando el ambiente parece que nos lleva al mal. Hacer el bien, practicar la justicia es una bienaventuranza que nos dice: “Felices ustedes”
Felices ustedes cuando sean insultados, perseguidos y calumniados a causa de Mí y del Evangelio
Y la última es la más difícil de entender, felices ustedes cuando sean insultados y perseguidos y cuando se los calumnie de toda forma a causa de Mí y del Evangelio. Hermanos a quién le gusta que le calumnien, que le insulte, pero si es por hacer el bien, si estamos haciendo el bien y buscando el bien, que haya algún comentario, alguna lengua mala que hable no debe importar. Hay ese dicho que dice: “Maldición de la “sucha”, no mata al caballo” Cuanto le gustaría a una “sucha” que el caballo se muriera, pero si está fuerte no le va a pasar nada. Pues igual si estamos con Dios haciendo el bien, hermanos, perseveremos en El, no buscando siempre por el qué dirán, haciendo cosas que no están bien. Y termina diciendo estas palabras: Alégrense y regocíjense entonces porque tendrán una gran recompensa en el cielo.
El mensaje cristiano no se puede entender sin la fe, sin el amor de Cristo
Hermanos y hermanas, el mensaje cristiano no se puede entender sin la fe, sin el amor de Cristo. Si pensamos que todo acaba en esta vida, pues claro para qué hacer el bien si al final pueden triunfar los malos, para ser justos si al final triunfan los injustos. ¿Por qué? Porque el cristiano es ciudadano del cielo y sabe estas palabras: Alégrense, regocíjense porque ustedes tendrán una gran recompensa en el Cielo. Y así lo dice: “de la misma manera sufrieron y persiguieron a los profetas que les precedieron.
Hermanos, no olvidemos que como cristianos bautizados participamos de Cristo, sacerdote, profeta y Rey. Y con Cristo sigámoslo para tener la felicidad en esta vida, de un corazón puro, sereno en paz y en la vida eterna la gracia y la Gloria de Dios.
Que así sea con el poder de Dios.