Si su hija les dijera: “Yo quiero dedicar mi vida al Señor y seguirlo en el servicio a la Iglesia” ¿Cómo se sentirían?
Conocemos gente muy comprometida con el Señor, pero cuando sus hijos les dijeron: “Quiero ser sacerdote o religiosa” les han metido de todo para que no lo haga.
“Dedicar la vida al servicio de Dios y de la Iglesia, sabemos que son caminos difíciles que exigen una lógica que no es del mundo”
Si piensan que esto le trae a su casa dinero, olvídense. En el Padre nuestro pedimos el pan de cada día, también los pastores. No pedimos más.
Los que ponemos la vida al servicio del Señor, no buscamos ni lujo ni cosas preciosas. Buscamos un poco de amor y felicidad.
El que no entra por la puerta del corral de las ovejas sino trepando, es un ladrón, un asaltante.
Jesús se describe como la puerta y son ovejas el pueblo de Israel.
Siempre el Señor te propone un paso más, un camino más, para alcanzar la verdadera felicidad.
Seamos capaces de reconocer la voz del pastor a pesar de que a veces incomoda.
Homilía de Mons. Eugenio Coter
Obispo del Vicariato Apostólico de Pando
Presidente de la Comisión Episcopal de Comunicación
Abril 30 de 2022
El buen Pastor
Link para ver la Santa Misa presidida por Mons. Eugenio Coter
Obispo del Vicariato Apostólico de Pando
Si su hijo les dijera: “Quiero ir al Seminario y ser Sacerdote” ¿Cómo se sentirían?
Permítanme una simple observación, una simple pregunta a los que son papás. Si su hijo le dijera: “Quiero ir al Seminario y ser Sacerdote”. ¿Cómo se sentirían? ¿contentos? ¿felices de que su hijo quiera poner su vida a disposición del Señor? o ¿se angustiarían? o ¿les tocaría hacer un esfuerzo por que no les gusta lo que está escogiendo?
Si su hija les dijera: “Yo quiero dedicar mi vida al Señor y seguirlo en el servicio a la Iglesia” ¿Cómo se sentirían?
Si su hija les dijera: Yo quiero no solo ser catequista, yo quiero dedicar mi vida al Señor y seguirlo a tiempo completo en el servicio a la Iglesia, a los pobres como religiosa. Quiero irme al convento. ¿Cómo se sentirían?
Conocemos gente muy comprometida con el Señor pero cuando sus hijos les dijeron: “Quiero ser sacerdote o religiosa” les han metido de todo para que no lo haga.
No les extrañe la pregunta, he conocido gente muy generosa, muy comprometida con el Señor y hasta con la Iglesia, pero cuando sus hijos le han dicho: “Quiero ser sacerdote” le han metido de todo para que no lo hagan. “Quiero ser religiosa” Le han metido de todo para que no lo haga, si de verdad me quieres no te sales así de mi casa.
“Dedicar la vida al servicio de Dios y de la Iglesia, sabemos que son caminos difíciles que exigen una lógica que no es del mundo”
Hermanos el Señor necesita de esto, pero antes que necesitar de personas que lo siguen y ayudan a su Iglesia, en nombre del Señor, necesita de la disponibilidad de quien está alrededor. Ciertamente sabemos que son caminos difíciles, que exigen una lógica que no es la del mundo, pero en el mismo tiempo pueden pensar algo mejor si uno lo hace bien por supuesto, que dediquen su vida al servicio de Dios y de la Iglesia y a tiempo completo.
Si piensan que esto le trae a su casa dinero, olvídense. En el Padre nuestro pedimos el pan de cada día, también los pastores. No pedimos más.
Necesitamos de esto, pero parte que necesitar de esto, necesitamos que en la familia se sienta la alegría, la estima, la valoración de que un hijo pueda tomar este camino. Una hija pueda tomar este camino. Y cuanto es necesario, cuanto requiere generosidad, cuanto requiere valores. Si piensan que esto le trae a su casa dinero, olvídense. En el Padre Nuestro pedimos el pan de cada día, también los pastores. No pedimos más.
Los que ponemos la vida al servicio del Señor, no buscamos ni lujo ni cosas preciosas. Buscamos un poco de amor y felicidad.
Entonces no será una elección por dinero, no será una elección por la lógica del mundo, sino una elección de poner la vida al servicio del Señor confiamos que Él será la verdadera alegría porque al fin si lo piensan, en la vida, lo que buscamos no es sencillamente ganancia que todo mundo sabe que cuando va al cementerio la dejarán, a quién no ha trabajado para gozar de ella. No es esto que buscamos ni lujo ni cosas preciosas. Lo que buscamos en la vida es un poco de amor y un poco de felicidad. Entonces siguiendo este camino nuestros hijos, ciertamente, si lo harán bien, generosamente y fieles a la voz del pastor que los llama lograrán alcanzar este amor y la felicidad.
Los fariseos y jefes del pueblo se molestan cuando Jesús acaba su discurso ¿Por qué?
Una segunda reflexión, quiero tocar de paso para que entendamos la profundidad de esta palabra de Dios. Cuando Jesús acaba este discurso que hoy hemos escuchado, le describen fariseos, jefes del pueblo y se molestan, pero uno se pregunta ¿Por qué molestarse si la imagen es tan bonita? es tan de campo, de rural, de este pastor que cuida las ovejas.
Los preparativos para el cordero pascual
Hay una palabra: Corral que Jesús utiliza en el término original del griego, pero en de su tiempo en arameo que no era corral, era el auren, era el lugar delante de la casa del sumo sacerdote donde el viernes antes de la pascua, llevaban las ovejas y ahí las degollaban y preparaban el cordero pascual.
El que no entra por la puerta del corral de las ovejas sino trepando, es un ladrón, un asaltante.
Entonces no es la traducción precisa, no sería corral, sino más bien “encierro” un encierro en que las personas se aprovechan de las ovejas, las matan, las preparan para la pascua, referido esto directamente a la casa delante de la casa del sumo sacerdote. Eso les molesta, les aseguro que el que no entra por la puerta del corral de las ovejas, sino trepando es un ladrón, un asaltante, les dice.
Jesus se describe como la puerta y son ovejas el pueblo de Israel.
Entonces Jesús está diciendo: Yo soy una puerta y son ovejas los que eran la imagen del pueblo de Israel, la grey, viene del antiguo testamento, entonces Jesús se refiere al Pueblo de Israel. Este pueblo ha sido encerrado no en el corral sino en el encierro, donde les sacan la sangre, se aprovechan de ellos. Dice yo soy la puerta que los libera, y no solo porque ellos que tenían que cuidar de esta grey en realidad son asaltantes.
Jesús es duro con los jefes del pueblo, con los que tenían que cuidar del pueblo y se aprovecharon.
Les aseguro que yo soy la puerta de las ovejas, todos aquellos que han venido antes de mi son ladrones y asaltantes. Les da duro, los jefes del pueblo, los que tenían que cuidar del pueblo son los primeros que asaltan y degüellan las ovejas y se aprovechan de ella y le roban y le quitan todo. Y miren que subraya uno de los biblistas, solo Jesús se refiere a los ladrones, solo en referencia a Judás y a ellos escribas y fariseos y jefes del pueblo y bueno los dos ladrones que estaban en la cruz.
Son los únicos a quienes Jesús les indica por término de ladrones y eso es lo que dicen y escuchan mi voz, yo les saco, les libero, los libero de estos aprovechados por los que son los jefes que siguen en nombre de ellos, de protección de ellos, aprovechándose de ellos hasta que puedan, hasta matarlos.
En la noche, Jesús se propone ser la puerta y cuidar con su bastón las ovejas.
Jesus se propone ser como la puerta de la imagen porque cuando estaban en el campo, los pastores juntaban su grey hacían un muro de piedras en torno a ellas metían espinas para que no entren lobos osos o tigres y las ovejas las metían en este encierro, pero ahí se metía en la puerta que no podía ciertamente construir, se metía el pastor con su carga y el bastón para cuidar de las ovejas en la noche.
En la mañana Jesús libera a las ovejas para que puedan ir a pastar.
Pero en la mañana los sacaba afuera para que puedan ir a pastar, entonces esa es la puerta que libera, el que hace caminar el que hace salir, el que dona la libertad el que dona el autentico camino de encuentro con Dios. Si quieres encontrar a Dios pasas por esta puerta, si quieres de verdad transar la libertad, te sacan del encierro y te hacen pasar por esta puerta esto es cuanto encontramos en esta palabra.
Siempre el Señor te propone un paso más, un camino más, para alcanzar la verdadera felicidad.
Una indicación más, las ovejas reconocen la voz del pastor. En medio de tantas voces me pregunto a mí mismo siempre se estar atento a reconocer la voz de pastor, sabemos estar atentos a reconocer la voz del pastor que es el señor que muchas veces nos habla y nos damos cuenta y cuando nos habla a veces nos molesta, no importa cuanto lo sigamos, siempre el Señor te propone un paso más, un camino más, por alcanzar la verdadera felicidad.
Seamos capaces de reconocer la voz del pastor a pesar de que a veces incomoda.
Seamos capaces de reconocer hoy la voz del pastor a pesar de que a veces incomoda y escucharla. Pidamos al Señor como don, será parte de nuestra liberta verdadera, será parte de nuestra fe licitada, verdadera.