La comunidad terapéutica que actúa desde 1983 en el proceso de recuperación de personas que buscan liberarse de sus adicciones, especialmente el alcohol y las drogas. Su método de acogida incluye tres aspectos determinantes: el Trabajo como proceso pedagógico; Vivir juntos en una familia; y Espiritualidad para encontrar el sentido de la vida.
La fazenda está abierta en Bolivia, en El Fortín Libertad que está en el Municipio de San Julián, cerca de los troncos para acoger a hombres debilitados por el consumo de drogas, transformando el dolor en alegría. El número de comunidades en el mundo ya superó el centenar de unidades estructuradas en países de Asia, África, América y Europa, en continuo crecimiento debido a la globalización de los graves problemas sociales que aquejan a la humanidad.
Las personas que se identifican con el carisma de la fazenda pueden encontrar su vocación en la Iglesia formando parte de la Familia de la Esperanza, una Asociación Privada de Fieles, de carácter internacional, reconocida por el Consejo Pontificio para los Laicos, cuya misión es llevar Esperanza, a Jesucristo, al mayor número de jóvenes en el mundo, en palabras del Papa Benedicto XVI.
