Animados por el lema: “Junto a los jóvenes proclamamos el Evangelio a todos”, este Domingo Mundial de las Misiones más de 150 Jóvenes Misioneros de la Arquidiócesis de Santa Cruz vivieron una intensa jornada de evangelización y misión en la comunidad rural de la Parroquial San Isidro Labrador, distante 70 Km al norte de Santa Cruz.
Empezaron la “Misión Joven 2018” muy temprano con la Eucaristía de envío, presidida por Monseñor Braulio Sáez, Obispo Emérito de Santa Cruz que les envió a anunciar la alegría del Evangelio y les acompañó durante toda la jornada.
En su motivación inicial, Monseñor Braulio señaló que los jóvenes recorren el camino “Muchas veces con miedo, muchas veces con temor, muchas veces con desilusiones y dificultades, pero siempre con un amor grande a Jesucristo que ha cautivado su corazón”. En ese mismo sentido, el Prelado subrayó que a pesar de las dificultades, en Jesucristo encontramos un amigo grande que es capaz de conquistar el corazón de sus discípulos y animarles en el camino de la vida.
Después de la Eucaristía los jóvenes salieron por las calles de Minero y llegaron incluso a las comunidades de Chané Magallanes y Chané Independencia, visitando a cada una de las familias de los barrios más alejados de dichas comunidades, conociendo y compartiendo con ellos la alegría de ser Amigos de Jesús. Terminaron su jornada intensa de evangelización y misión con una “Caravana Misionera”.
Al final, los JOMIS expresaron su gratitud a Monseñor Braulio Sáez, por su especial cercanía y, al Párroco de Minero, el Padre Antonio Reyes y su comunidad “por recibirlos con los brazos abiertos y darnos la oportunidad de mostrar que “Junto a los jóvenes proclamamos el Evangelio a todos”.
