La Paz

UN SERVICIO Y DESAFÍO IMPORTANTE ES LA ATENCIÓN ESPIRITUAL A MILITARES Y POLICÍAS, REFIERE MONSEÑOR OSCAR

“Es un servicio al pueblo de Dios desde el Obispado Castrense para la atención  y servicio a militares y policías, sus familias y el entorno castrense”.  Así  explica Monseñor Oscar Aparicio la nueva misión encomendada por el Papa Benedicto XVI como Obispo Castrense, la posesión será este viernes 15 de junio en la sede episcopal del Ordinariato Militar en La Paz.

El nombramiento se dio a conocer el mes de abril durante la celebración de la misa crismal en la semana santa.  El Papa Benedicto XVI aceptó la renuncia presentada por Monseñor Gonzalo del Castillo  y designó a  Monseñor Oscar Aparicio como titular de esta diócesis.

“Este es un desafío grande  y espero estar a la altura para cumplir esta misión que el Señor me encomienda”, dijo  el nuevo titular castrense.

La sucesión episcopal  en una iglesia local se realiza normalmente cuando el Obispo titular llega  a ser emérito, vale decir cumple los 75 años de edad, en ese momento  -tal como señala el derecho canónico-    se  presenta una carta de renuncia al Santo Padre   y es él quien al aceptar está  situación nombra un sucesor para continuar el pastoreo de la iglesia local. Tal como es el caso de la Diócesis Castrense de Bolivia.

Cada caso es particular y dependerá de cada diócesis, su obispo y la decisión del Papa.

Muchos son los miembros castrenses y sus familias  en ambas instituciones -militar y policial-,  que se identifican como cristianos-católicos y manifiestan su fe públicamente en ese sentido un deseo manifestado por nuevo titular castrense es: “abrir las puertas a Cristo fuente de vida y salvación que ofrece una nueva vida a todos sus hijos”.