(COCHABAMBA) Mons. Luís Sainz Hinojosa, Arzobispo Auxiliar de la Arquidiócesis de Cochabamba, pidió durante su homilía, que Dios de fortaleza a las autoridades nacionales y departamentales “…para que en medio de tantas críticas y de tanto entender la problemática de nuestra Patria,… que Dios nuestro Señor nos ilumine y nos de fortaleza para seguir adelante construyendo una Patria mejor.”, dijo el Arzobispo durante la eucaristía celebrada en la Catedral Metropolitana por el 201 Aniversario de Cochabamba.
Texto completo de la homilía:
Siempre ante todo nuestro saludo cariñoso de bienvenida a nuestro Presidente del Estado Plurinacional, Don Evo Morales estamos muy contentos de su presencia nos honra y nos alegra, lo mismo al Vicepresidente del Estado Plurinacional Don Álvaro García, también gracias por estar con nosotros y compartir este momento de oración con el pueblo de Cochabamba.
Saludamos al Presidente de la Cámara de Senadores, de la cámara de diputados, al Alto mando militar, al alto mando policial creo que están algunos ministros de estado les damos la bienvenida a todos ellos.
A nuestro Gobernador del Departamento, a nuestro Señor Alcalde, Autoridades Nacionales, Departamentales a los señores Concejales, creo que he visto también a los del Comité Cívico y todas las Organizaciones Sociales, bienvenidos todos queridos hermanos, estamos en la casa de Dios, para pedirle mucha bendición.
Con fe con civismo, hemos venido a ésta histórica Catedral a pedir la bendición de Dios para Cochabamba en sus 201 aniversario del primer grito libertario, queremos agradecer por todos los beneficios que Dios otorga a ésta tierra.
Estamos ante los restos del General Esteban Arce, he leído en la prensa estos días en el que me parece no sé de donde lo han sacado, pero sabemos por la historia que aquí están los restos del General Esteban Arce con nosotros una plaqueta del año 1947, descansan en esta Catedral.
También estamos acá presentes, queridos hermanos para hacer memoria a los grandes e ilustres cochabambinos y considero esta ocasión muy propicia para reflexionar si somos dignos del sacrifico de nuestros mayores y si somos agradecidos de la entrega de sus vidas, en busca de un futuro más digno para los bolivianos.
Si esta tierra creada por Dios, regala con sangre generosa y está dando frutos de fraternidad de solidaridad generosa, de unidad para nuestra Bolivia o al contrario estamos dejando que crezca la yerba mala del odio, el rencor, el racismo, la discriminación, es una reflexión para todos los bolivianos, para todos nosotros.
Hoy la Iglesia en este 14 de septiembre, fiesta de la Exaltación de la Cruz y ante la mirada atenta del Cristo de la Concordia que es luz, esperanza para los Cochabambinos, pone a nuestra consideración el mensaje que acabamos de escuchar del Libro del Eclesiástico y del Evangelio de Mateo que nos dicen, simplemente recalcó algunos puntos de la Biblia de las lecturas que hemos escuchado.
Perdona las ofensas de tu prójimo y Dios perdonará tus pecados, cuando Pedro le pregunta a Cristo debo perdonar a mi hermano 7 veces? Cristo le responde no te digo que perdones 7 veces sino 70 veces 7, ósea en el leguaje hebreo, eso significa hay que perdonar siempre.
Para nosotros cristianos, la reconciliación y el perdón, tiene como objetivo la recuperación del hermano a favor de la sociedad, recuperar al hermano a favor de la comunidad, ese es nuestro objetivo principal. Todos conocemos que las leyes de la sociedad, de nuestra sociedad y de todo el mundo encarcelan a los delincuentes.
En cambio en la táctica evangélica es más humana, porque por medio del perdón rehabilita, regenera a la persona y le da la oportunidad para que pueda corregirse, para que pueda convertirse, para que mejore su conducta.
Jesucristo declaró la ley del Talión que todos ustedes y muchas mujeres conocen de la Ley del Talión, Jesucristo dijo que esa era obsoleta, en cambio nos propuso el perdón de las ofensas y equivocaciones y en Mateo 5, 38 ama también a tus enemigos.
Lo mismo también en la Biblia en el libro del Levito capítulo 19, versículo 17-18, dice: no odiaras de corazón a tu prójimo, corregirás a tu pariente para que no cargues con su pecado, no te vengaras ni guardaras rencor, si no que le amaras como a ti mismo. Eso es lo que dice la biblia y nuestra reflexión es cómo podemos pedir perdón a Dios si negamos su perdón a los demás. Es la reflexión del Padre Nuestro, porque el Padre Nuestro dice: perdona nuestras ofensas, así como nosotros también perdonamos a los que nos ofenden. Hay que vencer el mal a fuerza del bien hay que vencer el odio con el amor, eso es lo que nos enseña Jesús. Cristo desde la cruz es el primero que nos ha dado el ejemplo. Padres personales porque no saben lo que hacen.
En esta fiesta de la Exaltación de la Cruz, nos recuerda Jesús, que él perdonó a los que lo crucificaron, lo mismo también, el Papa Juan Pablo II perdono a aquel que le disparo para matarlo, fue a la cárcel y personalmente le dio su perdón. Nosotros nos hacemos la señal de la cruz personalmente como un signo de bendición de Dios, que Dios nos acompañe en nuestro diario vivir y trazamos la cruz sobre otras personas para que tengan vida y vivan con esa bendición de Dios, esa es una costumbre de nuestro pueblo que todos nosotros conocemos significa que la cruz es algo significativo para nosotros los bolivianos. Si hermanos Dios ha bendecido a los cochabambinos y este 201 aniversario es una buena oportunidad para recordar y rendir nuestro homenaje, nuestra gratitud a todos los hombres y mujeres que han trazado nuestra identidad.
Aquí voy a mencionar a unos, ustedes conocen muchos. Cochabamba ha sido muy fructífero en este sentido; como Don Estaban Arce Uriona, que está aquí, sus restos en medio de nosotros el vencedor de la batalla de Aroma. Menciono al General Pedro Blanco, un poco desconocido por los Cochabambinos; Pedro Blanco soto de 1795, tuvo una brillante actuación en las batallas de Junín y Ayacucho. Tenemos a Don Alejo Calatayud, tenemos a Nataniel Aguirre Gonzales; autor de Juan de la Rosa, tenemos una gran hombre, tal vez no le damos mucha importancia; Franklin Anaya un gran pedagogo de la talla de Simón Rodríguez, de Franz Tamayo, de Elizardo Pérez, coautor del primer plano regulador de Cochabamba, tenemos un cochabambino Rafael Araya, especialista en quechua y socializador de este idioma en Bolivia, tenemos otro gran pintor, de Ayopaya Gildaro Antezana, que también todos ustedes le conocen. Tenemos al doctor Martín Cárdenas, botánico –naturalista, también muy conocido. Tenemos a José Matías Carrasco, pionero de la vinculación caminero Cochabamba y Beni, muy reconocido, muy alabado, por Dorbigni. Tenemos al gran poeta, Don Javier del Granado un gran católico reconocido internacionalmente, muchas veces galardonado, tenemos a Augusto Guzmán, biógrafo de don Florentino de Cárdenas y de Adela Zamudio a quien nosotros conocemos como una gran poetisa, como ejemplo de todas las mujeres de Cochabamba junto a las Heroínas. Tenemos a Mariano Guzmán Lous, que firmó el Acta de la Independencia de Bolivia, que es el fundador de la Corte Suprema de Justicia, que nació en Santibáñez Cochabamba. Y así tenemos a Jesús Lara de Cuchu Muela, estudioso de la lengua quechua, tenemos queridos hermanos cochabambinos músicos, poetas, pedagogos, periodistas, sacerdotes, intelectuales, filósofos, tenemos mucha gente que nos ha dado ejemplo de patriotismo ejemplo de civismo ejemplo de progreso. Todas estas personalidades pensantes sin duda alguna son el fruto elocuente de esta tierra que engrandece a la patria y que han seguido el ejemplo de nuestros mayores. Queridos hermanos simplemente he mencionado algunos, hay muchos, hay cientos más en Cochabamba, creo que Cochabamba debe sentirse orgullosa, satisfecha de sus hijos y de nosotros que estamos acá, también trazando la historia. Debemos seguir ese mismo ejemplo para seguir adelante. Que Dios nuestro Señor bendiga a Cochabamba y Bolivia, que Dios nuestro Señor, les de la fortaleza suficiente a nuestras autoridades nacionales y departamentales para que en medio de tantas críticas y de tanto no entender la problemática de nuestra Patria, a veces damos críticas negativas que Dios nuestro Señor nos ilumine y nos de fortaleza para seguir adelante construyendo una Patria mejor. Felicidades Cochabamba gracias una vez más por su presencia pidamos a Dios una oración muy sentida, muy de corazón para que con la ayuda de Dios sigamos construyendo una Patria mejor. Muchas gracias.
Mons. Luís Sainz Hinojosa
ARZOBISPO AUXILIAR DE COCHABAMBA