Mons. Braulio Saez expresó su homilía con el deseo de que el año que comienza sea el inicio de una vida nueva con la Palabra de Dios. “Algo tiene que nacer de nuevo en este año en nuestros corazones. Es el inicio de un año que se nos abre cargado de esperanzas y de tareas a construir con nuestras manos”
Mons. Saez enfatizó en que La palabra de Dios quiere orientarnos, guiarnos y acompañar el camino que iniciamos hoy y a lo largo de este año. “No podemos aceptar ingenuamente todo lo que nos propone esta sociedad mercantilista. No podemos aceptar todo lo que se nos está diciendo en las campañas electorales. Hay que abrir los ojos y los oídos para interpretar lo que se ve en la propaganda televisiva radial y callejera”
El prelado exhortó al hombre de fe para que se deje guiar por la sabiduría, “no la sabiduría de este mundo sino la sabiduría que emana de Dios que se hace presente y se gloria en medio de su pueblo y abre la boca en asamblea del altísimo. La tenemos que sacar a la luz y manifestar siempre”
Por otro lado Mons. Sáez advirtió que la sabiduría de los poderosos se asienta sobre el orgullo sobre el poder “es una sabiduría que quiere imponerse por la fuerza no es una sabiduría que se da gratuitamente al mundo”
Ante este panorama exhorto a los fieles “Si queremos sobrevivir debemos recuperar la virtud de la gratuidad frente al mundo egoísta y obsesionado por el dios del dinero que se ha convertido en la base y fundamento de la felicidad en medio de tanta miseria y pobreza”
Al advertir que vivimos en un mundo en el que solo se piensa en el interés material parafraseó a San Pablo que dijo “Bendito sea Dios que nos ha bendecido en Cristo con toda clase de bienes espirituales en el cielo y nos ha elegido antes de la creación del mundo para que fuéramos santos”
Mons. Saez denunció que La droga, las armas, las prebendas, los compadrerios y tanta corrupción que vemos en nuestra sociedad “es la moneda que esta viciando nuestra sociedad”.